10 abril 2007

Paros Cardíacos en Futbolistas

Este es un recordatorio que hago en nombre de jugadores que ya no están dentro de un terreno de juego. Espero les agrade la nota.

MUERTES SÚBITAS EN EL FÚTBOL

En poco más de dos meses se cumplirán 4 años de un momento trágico en el fútbol mundial, algo que fue televisado a todos lados y que dejó un sinsabor amargo en muchas personas, más allá de que con el tiempo las cosas suelen olvidarse. La referencia es por la muerte súbita, el 26 de junio de 2003, del futbolista camerunés Marc Vivien Foé.
Ese día jueves dejó en velo a todo el mundo. Las selecciones de Camerún y de Colombia se disputaban un lugar en la final de la Copa Confederaciones, versión 2003, que organiza la FIFA. Durante el partido, mientras transcurría el minuto 71 de juego, Marc Vivien Foé se desplomó en pleno círculo central de la cancha. Al instante de su caída los médicos lo asistieron con mucho fervor, pero luego de momentos interminables y a pesar de la atención recibida Foé abandonó el terreno de juego ya fallecido. El árbitro Markus Merk se vio obligado a suspender el partido.
Una vez realizada la autopsia se descubrió que su muerte fue a causa de un ataque cardíaco a consecuencia de que se le extendió su ventrículo izquierdo. Estudios toxicológicos no mostraron rastros de drogas en su sistema.
Este caso fue el primero que se vio en todo el mundo, pero lamentablemente no fue el único, ya que 7 meses después del deceso de Foé se dio otro acontecimiento de similares consecuencias. Miklós Fehér, nacido el 20 de julio de 1979 en Tatabánya (Hungría), desarrolló casi toda su carrera en la liga portuguesa de fútbol y fue disputando un partido para el Benfica de ese país donde vio su muerte.
El 25 de enero de 2004 se enfrentaban Vitória S.C. frente al Benfica. Durante ese partido, en el cual se jugaban los últimos minutos, Fehér recibe una tarjeta amarilla y la recibe hasta con una sonrisa. Luego de eso comienza a dirigirse a su posición dentro del terreno de juego, pero sin motivos comienza a caminar más despacio y a inclinarse, hasta que finalmente cae inconsciente al suelo. Instantáneamente fue trasladado al Hospital de Guimaraes donde falleció a causa de un tromboembolismo pulmonar.
La lista de acontecimientos como estos es extensa. Otro de los casos que se puede mencionar es el de Paulo Sergio Oliveira Da Silva, más conocido como Serginho, quien fue zaguero y símbolo del equipo brasileño Sao Caetano, debido a que fue el cuarto jugador con más presencias en ese equipo, con 232 partidos y 14 goles. Serginho falleció a los 30 años a causa de un paro cardíaco el 26 de octubre de 2004, casi 9 meses después del caso Fehér. Su deceso, como los demás, fue en pleno partido frente al San Pablo en el estadio Morumbí.
Desde sucesos como estos se puso en tela de juicio si los controles son suficientes y, al mismo tiempo, eficientes, aunque la charla se puede dar desde varios puntos de vista. Uno de los ángulos es que enfermedades como ésta, por llamarles de alguna manera, son hereditarias y que por muchos controles que se hagan nunca saldrán a la vista, salvo en el caso extremo de la defunción.
Suele recaerse en que la edad puede ser un factor determinante para sufrir un paro cardíaco, pero esto no es así y hay casos que lo comprueban. Víctor Alfonso Guerrero, nacido en Colombia, tenía 17 años y, según sus allegados, era un jugador completamente sano y sin ningún tipo de enfermedad, pero esto no lo dejó exento de sufrir del síndrome de la muerte súbita el 11 de Abril de 2006. Todo sucedió en una práctica, a los 15 minutos de iniciada, el jugador se desvaneció y en seguida recibió reanimación cardio-pulmonar, pero al llegar al hospital de Envigado (Colombia) ya no presentaba signos vitales.
Lamentablemente existen casos en los que jugadores de fútbol y de otras disciplinas no pueden retirarse del juego debido a causas que no son por decisiones propias. Más allá de eso hay situaciones aún peores como en las que la pasión del hincha lleva a cometer atrocidades. Así pasó con el jugador colombiano Andrés Escobar Saldarriaga, quien fue asesinado por haberse hecho un gol en contra en el Mundial de Estados Unidos 1994 y con ese autogol la eliminación de su Selección a manos del país organizador por 2 a 1. Si bien fue una situación bien distinta a las de Foé, Fehér y Guerrero, no deja de estar dentro de las carreras “sin finalizar” de algunos futbolistas.
Es difícil determinar quién es más propenso o no a sufrir de un ataque cardíaco, lo cierto es que la medicina siempre avanza y ojala eso sirva para encontrar una solución a situaciones que lamentablemente ya sufrieron varios jugadores.
Foto 1: Marc Vivien Foé. / Foto 2: Miklós Fehér. / Foto 3: Andrés Escobar. / Foto 4: Serginho.



Video Recordatorio de Marc Vivien Foé.


Video Recordatorio de Miklós Fehér.

Autogol por el que fue asesinado Andrés Escobar.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

bertmichaels dice:

los casos que tan bien documentas solo son los más representativos. estamos hablando al más alto nivel deportivo e incluso ahí la medicina no pudo detectar los fallos congénitos que supusieron la muerte de estos deportistas de élite. qué no pasará en los deportes base donde los controles médicos no son tan exhaustivos? muchos adolescentes y jóvenes están poniendo en riesgo su salud y su vida cuando por el contrario estamos pensando que llevan una vida saludable

Anónimo dijo...

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Anónimo dijo...

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